La tragedia de Iraq exige la restauración de la justicia y la paz
Reaccionando frente a los trágicos sucesos ocurridos en la mezquita de Kadhimiya en Bagdad el 31 de agosto, que según las autoridades iraquíes pueden haberse cobrado las vidas de un millar de peregrinos, el secretario general del Consejo Mundial de Iglesias, Rev. Dr Samuel Kobia, expresó las profundas condolencias y el pesar compartido por los cristianos de todo el mundo por estas muertes.
Kobia declaró: "Estamos profundamente conmovidos por los trágicos sucesos de ayer en Bagdad, en los que murieron cientos de peregrinos inocentes. Compartimos la aflicción y el pesar por esta trágica e innecesaria pérdida de vidas humanas. Junto con las iglesias de Iraq, expresamos nuestra solidaridad y acompañamos en el sentimiento a la comunidad musulmana de Iraq y a todos los ciudadanos de ese país desgarrado por la guerra."
En una carta al presidente de Iraq Sr. Jalal Talabani, Kobia añadía que “Este incidente, sin embargo, es resultado directo del actual ambiente de temor y las intensas medidas de seguridad que han empeorado la situación del país desde la ocupación por fuerzas militares extranjeras. El Consejo Mundial de Iglesias ha abogado reiteradamente en favor de esfuerzos diplomáticos sostenidos para restablecer la paz en Iraq, de manera que la población pueda llevar una vida normal con dignidad. Este trágico suceso es un crudo recordatorio a la comunidad internacional de su obligación de restablecer urgentemente la paz y la justicia para todas las comunidades iraquíes.”
<span style=""» A continuación se reproduce el texto completo del mensaje:
Excelencia:
En nombre del Consejo Mundial de Iglesias, comunidad de 347 iglesias miembros de todo el mundo, expreso mis condolencias y preocupación por la reciente tragedia en su país. La estampida que resultó en la muerte de hasta un millar de personas, principalmente de mujeres, niños y ancianos, y cientos de heridos, ocurrió mientras los miembros de la comunidad chiíta acudían a la Mezquita de Kadhimiya en Bagdad para conmemorar el aniversario de la muerte del Imán Ibn Jaafar Al-Khadim. Es en verdad doloroso y aflictivo que ésto haya ocurrido en tan solemne ocasión.
Este incidente, sin embargo, es resultado directo del actual ambiente de temor y las intensas medidas de seguridad que han empeorado la situación del país desde la ocupación por fuerzas militares extranjeras. El Consejo Mundial de Iglesias ha abogado reiteradamente en favor de esfuerzos diplomáticos sostenidos para restablecer la paz en Iraq, de manera que la población pueda llevar una vida normal con dignidad. Este trágico suceso es un crudo recordatorio a la comunidad internacional de su obligación de restablecer urgentemente la paz y la justicia para todas las comunidades iraquíes.
Pedimos a Vuestra Excelencia que transmita nuestras profundas condolencias y nuestro pesar compartido a las víctimas y sus familias y a los dirigentes de la comunidad islámica.
Oramos a Dios para que en su gracia otorgue valor y paciencia a quienes han sufrido y perdido a sus seres cercanos y queridos. Oramos también por Vuestra Excelencia y los dirigentes de Iraq que se esfuerzan por atender las necesidades humanitarias y emocionales del pueblo de Iraq tras esta lamentable tragedia.
Con la seguridad de nuestras oraciones y nuestro apoyo constante, reciba nuestros respetuosos saludos.
Rev. Dr. Samuel Kobia
Secretario General
Consejo Mundial de Iglesias